'Fastidiar a la estupidez'
ENTREVISTA A MICHEL ONFRAY La filosofía sana y salva (¿cura y redime?) HECTOR PAVON. Tomado de Clarín (Argentina) hpavon@clarin.com Michel Onfray disecciona el devenir desde su casa en Argentan, Francia. Desde las márgenes, y con la lente del anacoreta, recorre el mundo de las ideas. Vive en un chalet lejos del ruido parisino, de los círculos intelectuales: es solitario, ateo, filósofo sin marco académico tradicional. Publicó más de 40 libros y sigue preceptos del filósofo Diógenes, al que considera un pensador revolucionario. "Diógenes reivindicaba un lugar en Atenas que era una anti academia: el Cinosargo, en otras palabras, el cementerio para perros. Como burla, contra el ideal platónico de la Academia, los cínicos, que habían transformado la franqueza natural del perro en su emblema, eligieron ese lugar como provocación". Platón era rico y aristócrata, bien nacido y de buena familia, no necesitaba ganarse la vida, acusa el filósofo que creó la Universidad Popular de Caen.