Izquierda-Derecha=Ligero contra pesado
"Todos los temas que son importantes para los seres mortales al margen del entramado social, esos temas que en círculos filosóficos son denominados "existenciales": el amor y sus paradojas, la finitud, el tener que decidir en la angostura del tiempo y con conocimientos limitados, la imposibilidad de ser bueno... todo ese horizonte trágico, en fin. A esto se añade que la satisfacción es esquiva, el descubrimiento de que la iniciativa es la nervadura de la guerra, y que para llevar la vida más simple se necesitan virtudes empresariales. Todos estos son motivos que enervan a los intelectuales más estrechos de miras.
Pero hoy no existe ya otra cosa: la inteligencia no vive más que en la apertura a lo que le resulta incómodo. Y así, en un momento dado, se convierte en algo estéril, por no decir absurdo, preguntarse si éstos son temas idiosincráticos de "la derecha". Me gustaría ir al meollo del asunto. La Modernidad no es un tiempo de paz, sino una época que tiene que lidiar con el conflicto de todos los conflictos. Estamos envueltos en una guerra mundial invisible y apenas comprendida, una guerra universal muy profunda por el peso del mundo. Esta es la guerra de lo ligero contra lo pesado. Hasta ahora esta guerra era idéntica a la guerra entre la izquierda y la derecha, habida cuenta de que las izquierdas representaban la voluntad de aligerar la vida y la superación de las cargas indignas que se ciernen sobre nosotros. Lo pesado es inhumano: éste es más o ménos el axioma subyacente de la izquierda. Ser moderno y de izquierdas, esto significa, en primer lugar, vivir en algo así como en un proyecto de aligeramiento y tomar parte en las conquistas que hacen la vida más ligera para el mayor número de personas posible. Pero esta acción de la izquierda, una acción que ha marcado toda una época, siempre ha ido seguida de una reacción de la derecha que, desde las postrimerías del siglo siglo XVIII, se ha manifestado de manera ruidosa y consciente de sus principios. La esencia de las derechas o la derecha radica en que rechaza esta nueva ligereza y reflexiona sobre los límites del aligeramiento. La derecha era hasta hace poco el partido de lo pesado, la derecha cree en la imposibilidad de superar lo ineludible, una categoría, dicho sea de paso, con la que Heidegger ha trabajado. Ésta es la razón por que la derecha siempre ha tenido un concepto de la realidad más duro, más correoso y también más sombrío. El mundo es pesado, y más pesado de lo que el día ha pensado... este sería el himno de los conservadores. En el fondo, podría decirse, si se quiere formular esto de un modo amable, a la vez altamente ajustado, que los conservadores reales no son conservadores de privilegios ni tampoco conservadores de valores: son conservadores de lo pesado. De ahí que en el seno de la derecha exista un concepto de sacrificio mientras que, en la izquierda, a lo sumo, un concepto de esfuerzo, de derroche. La derecha puede concebir que los hombres, de vez en cuando, no sólo mueran a causa de algo, sino por algo. La izquierda sólo puede indignarse por tal hecho o mirar a otro lado... al menos así hace en un tiempo como el nuestro, donde los combates por la libertad hace tiempo que quedaron atrás y los mártires de la izquierda son percibidos más bien con cierta perplejidad. En esta idea de "muerte por..." se pone de manifiesto cierto aspecto del viejo peso del mundo. [...] Las izquierdas utópicas albergan el sueño de aligerar la vida hasta privarla totalmente de peso, quieren la gran fiesta, ahora y para siempre..."
Peter Sloterdijk, Experimentos con uno mismo. Conversación con Carlos Oliveira. Germán Cano (Trad. introducción y notas) Valencia, Pre-textos, 2003.
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ResponderBorrarMe hubiera gustado saber que seguia en el articulo pq el autor dice todo el tiempo que esto era hasta "hace poco"... pareceria decir que ya no es asi.
ResponderBorrarPero aparte, puedo equivocarme, pero me parece una sobre simplificacion de la izquierda de una forma increible. Si el mundo ha mejorado no es por la derecha, es por los miles de izquierdistas que se han encargado en sus respectivos paises de luchar contra el terror de la derecha: los movimientos de los derechos civiles en Estados Unidos, los movimientos sindicales y laborales, el movimiento de Ghandi... si los estudiantes, si los obreros, si las mujeres, si las minorias hoy tenemos algunos derechos (aunque no sean todos los que nos merecemos) se lo debemos a la izquierda... no a la derecha... Y si no es que sea ingenuo y piense que la izquierda no ha hecho nada malo, pero ese tambien es el problema con la terminologia de izquierda y derecha... es variable y contextual. Cosa que en este extracto no se plantea y se hace una sobre generalizacion (a la modernista, tal y como se critica)
de los movimientos.
Por otra parte, todo este ultimo parrafo es pura fantasia: "La derecha puede concebir que los hombres, de vez en cuando, no sólo mueran a causa de algo, sino por algo. La izquierda sólo puede indignarse por tal hecho o mirar a otro lado... al menos así hace en un tiempo como el nuestro, donde los combates por la libertad hace tiempo que quedaron atrás y los mártires de la izquierda son percibidos más bien con cierta perplejidad. En esta idea de "muerte por..." se pone de manifiesto cierto aspecto del viejo peso del mundo. [...] Las izquierdas utópicas albergan el sueño de aligerar la vida hasta privarla totalmente de peso, quieren la gran fiesta, ahora y para siempre..."
Miles de martires de la izquierda que hay en todas partes del mundo. Que es preferible no tener que morir? Siempre sera asi.
Si te fijas se trata de una conversación, no de un artículo y en ese pasaje el filósofo no está simplemente poniendo en una balanza (esa maquinita bipolar) los logros de un sector político contra los del otro.
ResponderBorrarComenta precismente un avatar ideológico, un imaginario de la derecha que desde la izquierda es incomprensible o por lo menos hermana a la izquierda con la derecha: el martirologio. La celebración o naturalización del "morir por una causa".
En su concepción de la izquierda como aligeramiento, como fluidez y fiesta no caben esos listados como los que usted pergeña donde Gandhi, las mujeres, los sindicatos, todos armóniacmente se dan la mano izquierda. Tremendo bulto de imprecisión y vaguedad. Obesidad histórico-cultural.
El muchacho alemán parece que anda en una reconfiguración de lo que asumiríamos como izquierda y derecha.
Los mártires son imágenes para la postración y vergüenza de los vivos.